Aprender a aquietar la mente con Myfullness.
- Evelyn Ferretti
- 20 ago 2017
- 2 Min. de lectura
Son las 9 de la mañana en el Centro Mandala, en una sala destinada a la meditación, Marta Martínez, psicóloga del lugar, se propone a realizar una terapia llamada Myfullness. Se observan algunas personas sentadas en el piso de la habitación, sin zapatos, con ropa holgada y sin sus pertenencias, las mismas que dejaban en un closet para luego retornar en este ambiente de paz que se deja sentir, adornado con plantas acuáticas y velas encendidas que son parte del entorno junto con los jardines que lo circundan.
Cerca de las 9h30 de la mañana, Marta llama a los presentes con un suave sonido que hace con una pequeña campana, todas y todos responden con su atención, ella pide que se sienten de una forma cómoda dentro de un círculo, que ella también ocupa. Ubicada en el centro sobre un Zafusen de suave textura, junto a este un cuenco dorado, que tiene dentro un pequeño palo de madera, además de una campanilla que componen su espacio.
Da inicio con una breve explicación de las bondades de este método cuyo nombre se traduce como ¨aprender a aquietar la mente¨, esta técnica se usa frecuentemente en las escuelas de otros países con la finalidad de enseñar a los chicos a centrarse en el aquí y el ahora, aceptando los pensamientos que vienen, y dejándolos pasar, ubicándose en el presente y tomando control de su mente.
Continúa y con voz suave pide a las personas cerrar los ojos y tomar una respiración suave y profunda, la misma que es seguida por otra y a medida que ocurre este acto natural, los invita a fluir, a pensar en el mar, en su brisa, sin dejar de inhalar y exhalar.
En la estancia el tiempo no parece tener importancia, así fácilmente transcurren los treinta minutos destinados a este ejercicio. Aprender a controlar la mente no es tarea fácil, los pensamientos muchas veces son comparados con una radio que está prendida todo el tiempo, la misma que es capaz de absorberte del presente, así lo narra María de Lourdes, quien lleva practicando esta técnica por más de tres meses y expresa que no es sencillo tratar de ser consciente de esto y aún más difícil le parecen los períodos en que dentro de la terapia se las invita a dejar la mente en blanco.
Son aproximadamente las 10 de la mañana de aquel sábado y para concluir con la meditación, la facilitadora toca nuevamente la campanilla, pide a los presentes ubicarse y recordar el lugar donde están, respirar una vez más, abrir los ojos y agradecer por estar allí, por encontrase compartiendo en este centro que se dedica a acompañar a las personas que buscan mejorar su experiencia de vida con la práctica de estas y otras técnicas psicológicas y espirituales.

Doctora Marta Martínez: Especializada en terapia Myfullness.

Centro Mandala – Terapia Myfullness
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